Las palabras siempre alcanzan. Es sólo esa sensación de vacío de cada vez que no se nos ocurren adjetivos elocuentes...
Mis palabras son un árbol junto a muchos otros. Mis palabras solas no podrán hacer jamás un bosque, pero si las dejas crecer puede ser que den un poco de aire y de sombra. Puede ser que pierdan hojas en otoño para recibir desnudas al invierno, porque saben que ya vendrá la primavera de tus ojos para hacerlas florecer.
Mis palabras son de aire: siempre podrás respirarlas, o simplemente desplegar las alas y apoyarte en ellas cada vez que quieras levantar el vuelo.
Mis palabras son de agua: siempre podrás beberlas, o simplemente verlas nacer entre mis piedras, cantar hasta llegar al mar, y luego evaporarse antes de precipitarse sobre ti.
Mis palabras son de madera: siempre podrás hacer un barco, o simplemente echarlas al fuego para hacer que ardan y te den un poco de calor.
Mis palabras son un recorrido; son promesa y son memoria. Simplemente son la carne viva de cada fragmento de cielo que tiembla cada vez que nos tocamos.
1 comentarios:
Árbol
Aire
Agua
Madera
Recorrido
No dejan de ser tus palabras, aunque te quedes suspenso ante la falta de algún adjetivo.
Palabras multifuncionales.
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